Según Kurama, la fuerza de los Bijus era determinada por el número de Colas. Gracias a esta creencia, hubo ciertas fricciones entre los BIjus, pero dicha creencia no es del todo errónea.
Los Bijus entre las 2 y 9 Colas, usaban la Bijudama, mientras que al Shukaku, el Biju de menos colas, nunca se le vio usarla en la serie. En su lugar, lanzaba ráfagas de aire comprimido.
La mayoría de Bijus, le otorgan a su Jinchuriki un manto de chakra rojo que aumenta su poder. El Biju de una cola, por su parte, no otorga ese manto, sino que más bien, su Jinchuriki adquiere características físicas del propio Biju, y esta transformación es muy inferior a la del resto de Jinchurikis de los otros Bijus. Naruto con solo un poco del chakra de Kurama ya mostraba mejores hazañas que Gaara con la transformación del Shukaku. Y Mientras que el Biju de una cola otorga una transformación casi que monstruosa, el Biju de 9 Colas le otorga a su Jinchuriki un manto de chakra único que aumenta sus capacidades exageradamente.
Como dato extra, sólo el 50% de Kurama es igual o hasta más poderoso que el resto de Bijus por separado. El poder destructivo de una Bijudama de los Bijus entre 2 y 8 Colas es de una montaña; si estas Bijudamas se unen, el poder destructivo aumenta. Kurama y Naruto, por su parte, con sólo el 50% de su poder, igualaron con una Bijudama el ataque de Bijudamas combinado del resto de Bijus, es decir que el poder destructivo de una Bijudama de Kurama y Naruto es de mínimo varias montañas.